Primavera de marzo a mayo: encontrarás las playas con muy poca gente, pero todas las tiendas y restaurantes ya estarán preparados para recibirte. Si querés asegurarte mayor actividad en este periodo, viajá a mitad de mayo que está la “feria medieval” (uno de los mercadillos más grandes y se organiza en la ciudad amurallada Dalt Vila). Podrás apreciar artesanías, puestos de comida, actividades y llevarte una buena vista desde las murallas. Si sos muy friolento quizá te convenga visitar Ibiza en otro momento, ya que habrá sol, pero el agua todavía estará un poco fría.

Verano de junio a septiembre: como lo supondrás, es la temporada alta porque Ibiza está fuertemente asociado al verano, así que para esta época la isla dispone de una gran cantidad de planes tanto para el día como para la noche (Tendrás variadas opciones de shows y discotecas para divertirte). Te aconsejamos que vayas en junio o septiembre, ya que julio y agosto son los picos de esta temporada. Reservá con antelación y cuidate del sol y el calor que pueden llegar a ser sofocantes.

Otoño de septiembre a noviembre: muchos viajeros prefieren y recomiendan esta época y el mes de octubre, sobre todo porque ya no hay tantos turistas y la temperatura del agua sigue siendo agradable. Es posible que encontrés algunas ofertas en hoteles que buscan mantener los ingresos antes de que llegue la temporada baja.

Invierno de diciembre a febrero: la temperatura no es conveniente para meterse en el mar, pero podrás realizar actividades al aire libre. Si te gustan los deportes, caminar y disfrutar de la belleza natural de otra forma, esta época es ideal disfrutar de una Ibiza en calma.

¿Y vos en qué temporada prefieres visitar Ibiza? Cuéntanos y no olvides tu contar con una asistencia al viajero para protegerte de los imprevistos.

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